Teoría del color
Es un grupo de reglas básicas en la mezcla de
percepción de colores para conseguir el efecto deseado combinando
colores de luz o combinando colores reflejados en pigmentos.
En el ámbito práctico del uso del color, el conocimiento que
tenemos y hemos adquirido sobre éste hace referencia al color pigmento y
proviene de las enseñanzas de la antigua Academia Francesa de Pintura
que consideraba como colores primarios (aquellos que por mezcla
producirán todos los demás colores) al rojo, el amarillo y el azul.
Al tenor de este conocimiento práctico vemos que en realidad
existen dos sistemas de colores primarios: colores primarios luz y
colores primarios pigmento.
Mezcla sustractiva de colores
Los colores (pigmentos) que absorben la luz de los colores aditivos primarios (rojo, azul y verde: colores de luz) se llaman colores sustractivos primarios. Son el magenta (que absorbe el verde), el amarillo (que absorbe el azul) y el cyan (azul verdoso, que absorbe el rojo).
Entonces, si se mezclan pigmentos, se trata de una mezcla
sustractiva ya que con cada pigmento que se añade lo que hacemos es
absorber más partes del espectro; es decir, más colores primarios, y
el resultado final será la ausencia de luz: el negro.
Así, el magenta, el cian y el amarillo son colores pigmento, su fusión da el negro. Son los colores utilizados en la imprenta, las tintas y el papel. Su mezcla se llama síntesis sustractiva y es común en todos los sistemas de impresión, pinturas, tintes y colorantes.
Entonces, al hablar de mezclas de colores hay que diferenciar
entre mezcla aditiva y mezcla sustractiva.
Si se mezclan luces se trata de una mezcla aditiva y el resultado de la
combinación total es la luz blanca. Puedes reproducir cualquier
sensación de color mezclando diferentes cantidades de luces roja, verde y
azul. Por eso se conocen estos colores como primarios aditivos.
En el caso de los pigmentos usados en las pinturas, rotuladores,
etcétera se utilizan como colores básicos para realizar las mezclas
el amarillo, el magenta y el cian.
Color
El color es
una impresión visual que tiene el sujeto del objeto. En consecuencia, es
el resultado de un proceso múltiple donde intervienen distintos
elementos, factores y procesos (físicos, biológicos y
neuro-psicológicos).
Las diferentes sensaciones de color corresponden a luz que vibra
con distintas frecuencias, que van desde aproximadamente 4 × 1014
vibraciones por segundo en la luz roja hasta aproximadamente 7,5 × 1014
vibraciones por segundo en la luz violeta”
Partiendo de la luz blanca, de su percepción a través de la vista
y de la relación asociativa que realiza el cerebro en función de lo
percibido, el fenómeno se desarrolla consecutivamente, siempre y cuando
seamos capaces de percibir la reflexión de la luz en la materia.
Observemos esta definición amplia del fenómeno:
Color, fenómeno físico de la luz o de la visión, asociado con las diferentes longitudes de onda en la zona visible del espectro electromagnético.
Como sensación experimentada por los seres humanos y determinados
animales, la percepción del color es un proceso neurofisiológico muy
complejo. Los métodos utilizados actualmente para la especificación del
color se encuadran en la especialidad llamada colorimetría, y consisten
en medidas científicas precisas basadas en las longitudes de onda de
tres colores primarios.
Al entender lo anterior, se hace necesaria una definición circunscrita de dos elementos: luz y materia (pigmentos).
¿Qué es la luz?
Bien podemos entender a la luz como una “forma de radiación
electromagnética similar al calor radiante, las ondas de radio o los rayos X”
La luz
corresponde a oscilaciones extremadamente rápidas de un campo
electromagnético, en un rango determinado de frecuencias que pueden ser
detectadas por el ojo humano. El espectro lumínico se puede apreciar al
pasar un rayo de luz blanca a través de un cristal o prisma y como
resultado de la refracción se descompone y esparce en toda su gama. En
especial, se destacan los tres colores 1/3 o colores básicos de la luz
(se les llama así ya que ocupan 1/3 del espectro lumínico y los
restantes 2/3, como resultado de la interacción entre los colores 1/3.
“La luz visible está formada por vibraciones electromagnéticas
cuyas longitudes de onda van de unos 350 a unos 750 nanómetros
(milmillonésimas de metro). La luz blanca es la suma de todas estas
vibraciones cuando sus intensidades son aproximadamente iguales. En toda
radiación luminosa se pueden distinguir dos aspectos: uno cuantitativo,
su intensidad, y otro cualitativo, su cromaticidad”
Las propiedades de la luz siempre han inquietado al hombre. A mediados
del siglo XVII es donde encontramos los primeros tratados y teorías
sobre su conformación y propiedades. Desde Isaac Newton (1642-1727) hasta Einstein (1879-1955), con el objeto de explicar el efecto fotoeléctrico,
se formularon muchas teorías; éste último sugirió "que la luz, así como
otras formas de radiación electromagnéticas, viaja en pequeños haces de
energía llamados luz quanta o fotones". De ahí que la luz posea una
cualidad doble: onda-partícula. Su frecuencia y su longitud le otorgan
características de onda, pero su masa y conformación cuántica marcan un
comportamiento como partícula o fotón.
“La
luz es emitida por sus fuentes en línea recta, y se difunde en una
superficie cada vez mayor a medida que avanza; la luz por unidad de área
disminuye según el cuadrado de la distancia.”
De otro modo, también podemos decir que la luz
visible (luz blanca) está formada por emisiones electromagnéticas que
viajan por el espacio en forma de ondas, ordenadas en menor o mayor
grado, de acuerdo a su longitud de onda (expresada en nanómetros) y su frecuencia. Y como luz es igual a energía podemos definir su concepto de la forma siguiente:
"Es la energía que es
transmitida en forma de ondas a través del espacio, de la cual el
espectro lumínico forma parte. Toda la energía electromagnética es la
misma a través del espectro, diferenciándose únicamente en su longitud
de onda y en su frecuencia.”
En todo el amplio espectro de la energía electromagnética, podemos
encontrar ondas muy largas (alcanzando hasta 1 km. de longitud
correspondientes a la energía eléctrica) o muy cortas (los rayos gamma y
alfa, muy por debajo de la unidad nanómetro). Por supuesto, todas estas
emisiones son invisibles para el hombre. En cuanto al espectro
lumínico, sabemos que forma parte del espectro electromagnético,
definido por un rango determinado de longitud y frecuencia. Se le define
así:
"...en el espectro
visible es la pequeña fracción de la energía electromagnética a la cual
son sensibles los ojos del ser humano y comprende un rango de longitud
que va desde 400 a 700 nanómetros (billonésima parte de un metro; el
nanómetro es un nuevo término del sistema métrico, aceptado como un
"estándar" mundial, a excepción de Burma, Liberia y Estados Unidos..."
¿Qué son los pigmentos?
La capacidad que tienen los objetos para reflejar una determinada
emisión de ondas lumínicas se debe a la composición física de su
exterior. En este caso hablamos de los pigmentos que componen dichos
objetos o cosas. Los pigmentos están presentes en casi toda la materia. Y
se definen de la siguiente forma:
"Una sustancia de color
que es insoluble en el medio donde es esparcida. Un pigmento se
distingue de
una tinta o una tintura porque estos últimos son solubles en los medios o
vehículos con los cuales son mezclados. Son usualmente clasificados o
categorizados de acuerdo a su origen, ya sea orgánico (animal, vegetal u
orgánico sintético) o inorgánico (mineral o inorgánico sintético)”
Los pigmentos eran elaborados en un principio, a partir de plantas y
minerales, los cuales eran procesados, moliendo y pulverizando la
materia que la conformaban para luego aglutinarla en un medio
determinado y manipularla sobre otros objetos o cosas. El aglutinante es
el medio donde el pigmento es llevado, ejemplo de ello es el óleo,
compuesto por uno o más pigmentos y por un aglutinante hecho a base de
aceite.
En su conformación molecular, estos materiales poseen ciertas
características que determinan su reacción física ante la luz,
reflejando de ella una fracción y absorbiendo la restante energía que
incidente, dándonos la impresión cromática que corresponde al pigmento
colocado sobre la materia dada.
“Todos los objetos
tienen la propiedad de absorber y reflejar ciertas radiaciones
electromagnéticas.
(...) Casi todos los objetos deben su color a los filtros, pigmentos o
pinturas, que absorben determinadas longitudes de onda de la luz blanca y
reflejan o transmiten las demás; estas longitudes de onda reflejadas o
transmitidas son las que producen la sensación de color, que se conoce
como color pigmento.”
¿Qué es reflexión y absorción absoluta?
La luz blanca
"está compuesta por ondas electromagnéticas, diferentes entre sí por sus
longitudes", es decir, en un rayo de luz blanca viajan como ondas
electromagnéticas todas las longitudes de onda que corresponden a cada
color, todo a la vez. Así pues, tenemos que la luz blanca contiene en
suma, toda la gama de emisiones electromagnéticas que puede percibir el
ojo humano. Cuando esta luz la descomponemos en todas o alguna de sus
partes, es cuando podemos captar uno o varios colores. Esto puede
suceder al momento de la reflexión o refracción sobre una materia o a
través de ella.
De la refracción de la luz resultan los siguientes colores básicos:
azul-violeta (AV), azul-cian (AC), verde (V), amarillo (A) y rojo-naranja (RN). El magenta resulta de la mezcla de los extremos del espectro: azul-violeta y rojo-naranja. Estos cinco nombres comprenden
una generalización del espectro, ya que en la práctica no se suelen nombrar todos los demás colores intermedios.
Ahora bien, cada materia o elemento es capaz de longitud de onda
determinada (recuerda el punto "pigmentos") al ser expuesto a una
radiación. El elemento, al reflejar una longitud de onda determinada,
está absorbiendo el resto de las otras ondas; por lo tanto, lo que
percibimos es la reflexión de un color.
A diferencia de este efecto, en caso de absorber todas las ondas y no
reflejar nada es lo que llamaríamos ausencia de color o absorción
absoluta que corresponde al negro. Por lo tanto, el negro no es un color; no refleja la luz y por ende, ninguna de sus emisiones electromagnéticas. Ahora definamos el concepto:
"Es la ausencia de luz o
de reflexión de luz (transmisión) por un material o elemento, dando la
impresión de negro (...) Ningún negro es absoluto. Existe una teoría
sobre el Cuerpo-Negro (blackbody), término usado por los físicos
modernos, como la sustancia ideal que absorbe la totalidad de la
radiaci6n y no refleje nada sobre ella. Pero en la práctica, hasta el
material terrestre más oscura refleja al menos 3% de la radiación
incidente.”
Como se trata de un complejo proceso de factores, encontramos algunas dudas sobre su mecánica física y química respecto a sustancias determinadas:
“No se conoce bien el
mecanismo por el que las sustancias absorben la luz. Aparentemente, el
proceso depende de la estructura molecular de la sustancia. En el caso
de los compuestos orgánicos, sólo muestran color los compuestos no
saturados (…) Los compuestos inorgánicos suelen ser incoloros en
solución o en forma líquida, salvo los compuestos de los llamados
elementos de transición”
Gracias a los colores y la luz que poseen se pueden apreciar los objetos, evocar sensaciones y emociones ya que todo lo que existe en la naturaleza tiene color